Observando con detenimiento la publicidad del PSOE en la reciente campaña para las elecciones europeas y sin entrar a valorar el próximo acontecimiento planetario que tiene en éxtasis a Leire Pajín, como falangistas y extremeños nos preguntamos si para los socialistas Extremadura es o no es Europa. Vamos, que si ese partido que el PSOE decía jugar en Europa cuenta con canchas en Extremadura, o por el contrario nuestra región se va a convertir en el lugar donde se almacenen los trastos viejos, las porterías rotas, las redes inservibles, los balones pinchados y demás utillaje en desuso.

Por la vía de las palabras, tanto en los mítines del candidato López Aguilar como en cartelería y en la propia web estepartidosejuegaeneuropa.com, se nos decía, y citamos textualmente "que la Unión (Europea) ha de asumir decididamente el reto de la sustitución, paulatina pero consistente, de la energía del carbono por las energías renovables, la eficiencia energética en industrias, agricultura, transporte, edificios públicos y construcciones residenciales, avanzar en la sustitución de la energía nuclear e incorporar las tecnologías limpias a los sistemas de generación térmica e investigación en la captura del CO2. Sin embargo por la vía de los hechos nos encontramos con que en Extremadura existen tres expedientes de otros tantos proyectos con los que se pretenden instalar Centrales Térmicas de Ciclo Combinado en las localidades de Alange, La Zarza y Valverde de Mérida. Además, como todo el mundo sabe, existe otro expediente abierto mediante el cual se quiere construir una refinería de petróleo en la comarca de Tierra de Barros. Todo esto sin contar la prolongación, sine die, de la vida útil de la Central Nuclear de Almaraz.

Una de dos o el PSOE toma por tontos a los ciudadanos extremeños o sencillamente nos está mintiendo. No sabemos que es peor, aunque también pudieran ser las dos cosas, que nos tengan por idiotas y precisamente por eso nos mientan. Porque, vamos a ver, que nosotros sepamos poco de limpias y renovables tienen industrias como las centrales térmicas o una refinería de petróleo, que en nada contribuirán al desarrollo sostenible de nuestra región, y que son las que cuentan con el beneplácito del gobierno autonómico para su ubicación en nuestro territorio.

Así pues, cabe preguntarse si el discurso de campaña del PSOE, al menos en cuanto al tema energético se refiere, tiene en cuenta a Extremadura o por el contrario los socialistas quieren convertir a nuestra región en ese almacén de inservibles, ubicando en nuestro territorio industrias obsoletas y altamente contaminantes, en las antípodas del más elemental concepto de desarrollo sostenible y energías limpias. Un almacén y unas industrias que ninguna otra región de España quiere en su espacio geográfico.

FALANGE AUTÉNTICA de Extremadura