Juan Ramón Trillo
Mucho se ha hablado ya del Prestige, siempre en referencia a si las medidas que se tomaron fueron las correctas, los medios suficientes, si se tardó mucho en reaccionar, etc. Por otro lado, también se habló inicialmente sobre el estado de dicho buque y no sólo en lo referente a que no tuviera doble casco sino al hecho de que ni siquiera había pasado una inspección aceptable, a pesar de las falaces declaraciones que se hicieron desde Gibraltar, último puerto visitado por este barco pirata. Pero ¿qué es la Roca sino un nido de bucaneros y contrabandistas en la mejor tradición de sus mentores ingleses?.
Aunque esto no es lo peor del caso, ya que existen muchos buques de este tipo que no cumplen las mínimas condiciones de seguridad, controlados por auténticas mafias del contrabando, verdaderas bombas de relojería flotantes que estallan en el momento menos pensado.